Presentado en la exposición de París de 1823, se trata muy probablemente de uno de los modelos de serpentón recto que más éxito tuvo en la época, conservándose un gran número de ellos. Lleva el nombre de su inventor, el parisino Forveille. Se toca de forma similar al serpentón militar, disponiendo comúnmente de tres llaves. Su particular morfología separa la conicidad del tubo en dos partes: una de madera que abarca desde la campana hasta la parte inferior en la que se alojan los agujeros para la mano derecha; y la otra de latón en forma de “cuello de cisne” para los agujeros de la mano izquierda (a los que se añaden unas pequeñas chimeneas) y el tudel. También existen algunas versiones con esta última parte de madera.
Una de sus particularidades es el sistema para expulsar el agua: dispone de un receptáculo en el tudel en donde ésta se va depositando, lo que permite que al acumularse no borbotee mientras se toca. Llegado el momento de vaciarla, se puede desmontar mediante un sistema de rosca.
Detalle del receptáculo para el agua.
M. G. Hermenge, conocido por su método para serpentón con llaves, escribió también un método original para Serpentón-Forveille, con toda una parte final que incluye estudios y 6 dúos muy elaborados de varios movimientos cada uno. A parte de este método, no encontramos partituras que indiquen explícitamente este tipo de serpentón.
Ilustración del método de M. G. Hermenge.